Sí, todos tenemos nuestra propia marca, tanto como personas, y sobre todo como negocio que es lo que vamos a tratar en este post.
En el imaginario colectivo, siempre imaginamos a las marcas como grandes corporaciones que tienen grandes artistas, deportistas o personajes que promocionan sus Compañías y sus productos.
Pero vamos a creer en nuestras propias marcas, nuestros negocios, nuestras tiendas, que están situadas en un entorno en el que no somos el único negocio, y por tanto debemos crear nuestra «marca» .
En caso de ser minoristas, podemos estar en un barrio, en un pueblo o en un centro comercial, no importa la personalidad que tenga nuestro negocio marcará que nuestra marca sea importante para este público y esta clientela.
Sí, nuestra “marca” deberá “imponerse” a la competencia de otros negocios de nuestro barrio, si es una tienda, o del entorno en el que queramos vender si somos fabricantes o mayoristas.
Una definición genérica de marca: «conjunto de atribuciones que supuestamente son positivas e influyen decisivamente en el proceso de compra del consumidor y en su diferenciación respecto a la competencia, tanto a nivel físico como psicológico».
Por tanto debemos ser una «marca» imprescindible para nuestra clientela. Nuestros clientes evalúan las alternativas disponibles y toman la decisión final.